Pablo Iglesias sueña con un ‘paraíso comunista’: pide la creación de supermercados públicos

El ex líder de Podemos, Pablo Iglesias, ha abogado por la creación de supermercados públicos y supermercados autogestionados por los trabajadores con forma cooperativa para combatir «los abusos» de las grandes superficies.

De esta forma, Iglesias da un paso más en la propuesta hecha por la formación morada, que ha pedido intervenir directamente el mercado de la alimentación para abaratar la cesta básica de la compra y topar, al menos durante 2023, el precio de estos productos a los niveles que presentaban cuando comenzó la guerra de Ucrania, en febrero del año pasado.

Una medida que no es suficiente para el antiguo cabecilla de Podemos que subraya que la diferencia entre un supermercado público y uno privado es que el primero «tiene que ser eficiente pero no persigue el ánimo de lucro ni los grandes beneficios, sino satisfacer una necesidad social» lo que, a su juicio, le da «una enorme ventaja competitiva para pagar mejor a ganaderos, agricultores y a sus propios trabajadores».

Para Iglesias, los supermercados públicos serían la panacea al problema del alza de precios y, además, «favorecerían el empleo de calidad, a los productores locales y los productos ecológicos».

Además, también ha pedido favorecer la creación de supermercados autogestionados por los trabajadores con forma cooperativa que, ha afirmado, «ya existen en España pero no cuentan con apoyo público en forma de legislación favorable, subvenciones o líneas de crédito preferentes».

Estos supermercados, ahonda Iglesias, podrían estar en manos de «organizaciones de trabajadores, consumidores o productores que tomarían el control y podrían elegir los criterios que deberían tener sus productos, garantizando precios justos para los productores locales y los consumidores».

«Sus beneficios deberían tener una función social y política, o ¿a caso se puede hacer política en sociedades de mercado sin competir en el mercado?, una red de supermercados cooperativos autogestionados podría ser un poder económico progresista», ha lanzado desde su podcast La Base, titulado en esta ocasión «Y a ti, ¿qué supermercado te roba?».

Esta propuesta llega después de que el Índice de Precios de Consumo (IPC) haya subido dos décimas a finales de 2022 en relación al mes anterior pero con recorte de 1,1 puntos su tasa interanual, hasta el 5,7%, su cifra más baja desde noviembre de 2021, en contraposición con la tendencia de los precios de la alimentación, que se dispararon al 15,7%.

En caso de que el PSOE no apoyara la propuesta de Podemos de intervenir el precio de los alimentos, y para facilitar que se alcanzase un acuerdo cuanto antes, los morados también se abren a estudiar una bonificación de los productos de la cesta básica, como se hizo con los carburantes hasta igualarlos al nivel que estaban días antes de la guerra de Ucrania.

Y dado que esta segunda vía implicaría destinar recursos públicos, Podemos afirma que debería completarse con otras dos medidas. La primera sería establecer un gravamen extraordinario a las grandes cadenas de distribución, análogo al aprobado para la banca y las empresas energéticas.